Niños Rosados es el primer single del tercer disco del proyecto musical de Sebastián Sotomayor, un artista polifacético, compositor, músico de escuela, escritor y performancista. Cómo lo menciona en su entrevista para
Noisey, perteneció a la academia musical más kitsch de chile, la de
Luis Jara, de allí en adelante la formación y las decisiones de este artista lo llevan a crear un discurso que encaja a la perfección en el imaginario "queer", en el que también destacamos artistas del cono sur como nuestro favorito,
Dani Umpi,
Rucitama, y en menor escala
Alex Anwandter.
La voz y el poder interpretativo de (me llamo) Sebastián es innegable, navegando en un imaginario de canción de cuentos de Disney, pero con un trasfondo más profundo y a todas luces actual. En Niños Rosados o Niñas Azules, Sotomayor apuesta por un dramatismo cotidiano, una historia que puede ser la de cualquier gay, ve su traducción en estas letras que entre humor y crudeza nos cautiva de principio a fin. Bajo la producción de Mowat, encargado de algunos detalles, como la inclusión de la batería, el disco de Sebastián se erige como un mundo de descubrimientos, de detalles brillantes y lucidos, cartas abiertas en las que la estructura de la balada dramática impera y en la que podemos fácilmente encontrar uno que otro himno generacional.
El clip que vemos a continuación fue realizado por Víctor Almendra, y es ese feliz encuentro entre las letras explicitas de Sebastián y el apropiado tratamiento visual. Mezclando escenas de vídeos caseros y films antiguos, con otras de encuentros sexuales, personajes cotidianos, pasos de baile de k-pop y un encuadre de colores en los que nuestro héroe es decorado con pegatinas doradas.
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