Varios meses han transcurrido para que volvamos a escribir acerca de Helado Negro. Lo bueno tarda en llegar, dicen muchos. Sin embargo en la obra del artista ecuatoriano Roberto Lange, esa tardanza nos ha asegurado momentos muy gratos.
Llegamos a mitad de semana con la noticia del regreso de Helado Negro quien a propósito anuncia el lanzamiento de su próximo disco, Private Energy que saldrá en septiembre. La temporada de singles del álbum empieza así con el suspiro musical etéreo, Runaround.
Con cada nueva entrega, Roberto Lange nos aproxima a lo más íntimo de sus emociones. Entre las atmósferas electrónicas hechas de costuras sintéticas, el cantautor revela con minimalismo un inimaginable universo de sensaciones.
Con cada nueva entrega, Roberto Lange nos aproxima a lo más íntimo de sus emociones. Entre las atmósferas electrónicas hechas de costuras sintéticas, el cantautor revela con minimalismo un inimaginable universo de sensaciones.
Runaround no se exceptúa de ese universo. El nuevo corte del productor radicado en Estados Unidos nos conmueve desde la entrada. Los chirridos en el sintetizador carcomen nuestra expectativa y ahí estamos, preparándonos para flotar con Helado Negro. Sus palabras tan provocadoras nos incitan a que movamos los hombros y cerraremos los ojos. Estamos flotando en su ambiente.
Cómo siempre, la música de Helado Negro nos presenta distintos matices en los cuales podemos hallar algo para tod@s. Hay claustrofobia, amor e incertidumbre; sin embargo no son maquiavélicas las intenciones de Roberto Lange, su propósito es el de ilusionarnos y presentarnos una dimensión que pueda descifrarse mientras con los ojos cerrados, giremos y viajemos. Deleite garantizado.
******
No hay comentarios:
Publicar un comentario